El domingo agonizaba
Mi cuerpo también agonizaba
Mi cerebro recordaba aquellos tiempos terribles
Antes de que me abrieran en canal en un quirófano
Antes de que el anestesiólogo me hiciera contar de atrás hacia adelante
Antes de que tuvieran que suturar una porción de mi esófago con mi estómago
Cuando bastaba un pequeño trago de cualquier bebida con azúcar
Cuando bastaba una pequeña mordida a una rebanada de pizza
Cuando bastaba un pequeño sorbo a un vaso con jugo de naranja
Cuando bastaba una pequeña mordida a una hamburguesa
Cuando había olvidado qué era el placer y tenía que comer como astronauta
De pronto llegaste y tu presencia entró en mis ojos como un alfiler
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